Un cambio que aceleró el Covid es que el trabajo remoto hizo deseable la casa inteligente.
Para los emprendedores esto supuso ganancia: ya trabajar desde casa no es sinónimo de estar quebrado.
Sí, es cierto: los largos meses de aislamiento como medida de protección frente al Covid-19 lograron que muchos descubrieran, sorpresivamente, que tenían varias antes más o menos funcionales de claustrofobia.
Por ello, la mayoría de las empresas decidió, en general, que casi todo su personal volvía a las oficinas
Las palabras claves son “la mayoría” y “casi todos”.
Y es que no todos los t abajo res tienen que ir todos los días a la oficina, ni todas las empresas volvieron íntegramente a los espacios que ocupaban.
Lo más importante, sin embargo, es la ganancia para emprendedores, trabajadores autónomos y mipymes.
Al hacerse populares las tiendas virtuales el comercio desde las redes sociales e, inclusive, el uso de WhatsApp como canal, la vida de muchos emprendedores se hizo más fácil.
Pudieron adecuar su modelo de negocios. Quizás hacerlo más ligero, al trabajar por encargo y liberar buena parte de sus instalaciones.
Esto redujo los costos y los hizo casi exponenciales.
Casa inteligente = Negocio inteligente
Estos ahorros, sin embargo, deberían invertir se – inicialmente – en productividad.
Es decir, en hacer su oficina – casa lo más inteligente posible para aprovechar al máximo sus recursos, su tiempo y aprovechar las herramientas que, en la actualidad nos proporciona la tecnología.
¿De que hablamos? La gama va desde asistentes virtuales hasta el apoyo de herramientas de Inteligencia Artificial generativa (GenIA) disponibles en web.
A veces, inclusive, en forma gratuita o con precios ampliamente compensando por la ayuda que brindan al descargarlo de trabajo.
En este punto es seguro que se esté preguntando si los gastos de local y, quizás, el ahorro de in colaborador le alcanzarán para tanto.
La respuesta (contra todo pronóstico) es “Sí, por supuesto”.
Contrario a la percepción generalmente aceptada, no necesita vaciar sus bolsillos para tener un Smart Home.
De hecho, veamos algunos tips para empezar a armar su casa inteligente, con ayuda de Alexa y sin gastar miles de dólares. Ni siquiera cientos.
Empezar con lo básico
Lo primero es no estresarse y recordar que queremos ser más productivos.
Por lo tanto, no tenemos tiempo para puestas en escena demasiado elaboradas. Dicho de otra forma, no es necesario que todos sus dispositivos o electrodomésticos sean inteligentes.
De hecho, puede empezar por lo básico y en los espacios claves de su hogar, de manera tal que facilite el trabajo que haga desde él.
¿Y que es lo más fácil? Sin duda, iniciar con una bocina inteligente, como cualquiera de los diferentes dispositivos Echo con Alexa integrada.
¿Por qué? Esencialmente porque se convierte en un asistente virtual omnipresente, ya que puede colocarlo, prácticamente, en cualquier lugar de tu casa.
Existen modelos para todos los gustos, precios y necesidades como el:
- Echo Dot 3ra generación ($999)
- Echo Dot 5ta generación
- O el Echo Show 5, para quienes prefieren dispositivos con pantalla
Si, hay que n’es prefieren aquello de “para verte mejor”.
De cualquier forma, con ayuda de Alexa puede:
- Empezar a automatizar las tareas del hogar
- Controlar con tu voz dispositivos inteligentes compatibles
Esto incluye focos y enchufes, lo que nos permite encender luces o desconectar equipos a distancia.
Este dispositivo también nos permite programar rutinas y hasta encender o apagar tu televisión (y su computadora), entre muchas otras cosas.
Vea en la infografía lo que puede comenzar a hacer y pregúntese cómo todo eso puede mejorar su vida.