Según Kaspersky, los empleados desearán recibir más apoyo en la ayuda para hacer frente a los gastos adicionales generados por el trabajo remoto, así como un mayor soporte técnico y flexibilidad.
La pandemia de COVID-19 ha afectado a muchas empresas, aunque unas han sufrido más que otras. Según distintas investigaciones, en algunos países, hasta el 90% de las pequeñas empresas han experimentado efectos negativos por la pandemia, tales como caídas en la producción, las ventas y los ingresos, e incluso cierres. Especialmente en las empresas de menor tamaño (las que cuentan con una docena de personas o menos), la forma en que los empleados superan estos desafíos puede afectar en gran medida al estado de toda la compañía. Por lo tanto, es importante que los responsables vigilen cómo se sienten los empleados y supervisen las consecuencias que esto puede tener en su negocio.
La última investigación de Kaspersky reveló que la mayor brecha en cuanto a las expectativas de apoyo por parte de las compañías, se refiere a la flexibilidad. De acuerdo con la investigación, el 43% de los empleados de empresas con menos de 50 empleados y el 49% de aquellos en organizaciones que emplean entre 50 y 100 personas, desearían que su empresa les apoyara con una mayor flexibilidad.
El segundo aspecto mencionado por los trabajadores latinoamericanos corresponde a ayudas y beneficios sociales adicionales, tales como la cobertura de las facturas de Internet o de teléfono. De hecho, casi la mitad (48%) de los empleados de las empresas que tienen entre 50 y 100 empleados desearía recibir más apoyo en ese sentido, la cifra es igual en el resto de las empresas, sin importar el tamaño. El tercer requerimiento tiene que ver con el apoyo tecnológico (acceso a equipo y a las herramientas informáticas adecuadas). Más del 41% de los empleados latinoamericanos así lo señalan.
El apoyo emocional o psicológico es necesario en la misma medida para todos los empleados latinoamericanos. 27% de ellos, sin importar el tamaño de la empresa, respondieron que agradecería ayuda en este sentido. El impacto de COVID-19 no sólo ha afectado el trabajo y la vida diaria de las personas, sino que también ha causado ansiedad por su propia salud y la de sus seres queridos, así como un optimismo general por el futuro. Por lo tanto, el apoyo a la salud mental puede ser significativo para cualquier empleado.
Es necesario que el personal cuente con lo necesario para trabajar a distancia
“Ya que las políticas de distanciamiento continuarán por algún tiempo es necesario que los empleadores aseguren que su personal cuente con todo lo necesario para trabajar a distancia. De esta manera se podrá mantener la productividad y la moral del equipo. Además, el uso de dispositivos y servicios web personales para fines corporativos, lo que se conoce como el Shadow IT, subraya la importancia de brindar apoyo y capacitación técnica a los empleados para mejorar el desempeño laboral y evitar incidentes de ciberseguridad”, comenta Claudio Martinelli, director general para América Latina en Kaspersky.
Para facilitar las condiciones del teletrabajo, Kaspersky recomienda:
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La comunicación abierta y honesta es crucial para los empleados, ya que necesitan que sus responsables les indiquen cómo reaccionar ante situaciones de crisis. Se recomienda organizar sesiones abiertas con el equipo directivo para hablar con los empleados sobre cómo seguirá trabajando su empresa en las nuevas circunstancias.
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Realizar encuestas internas para comprender el estado emocional de sus empleados, su carga de trabajo, si tienen todo lo necesario para el teletrabajo y si tienen claridad sobre los procesos empresariales. Todo ello colabora a una mejor comprensión de las circunstancias específicas del personal en el momento actual y ayuda a tomar decisiones más equilibradas.
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Ayudar a los empleados a manejar la sobrecarga de información y la sensación de estar abrumados en este momento de incertidumbre. Mantener a los equipos informados sobre los hechos y la situación actual, así como sobre cómo mantenerse seguros y saludables.
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Crear canales de comunicación online para los departamentos de Recursos Humanos y TI para resolver problemas más fácilmente. Proporcionar orientación a todos los empleados sobre cómo habilitar el trabajo remoto y utilizar cierto software. Puede hacerse mediante seminarios web o llamadas de grupo.
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Educar a los empleados. Deben utilizar prácticas de seguridad básicas cuando trabajen a distancia que les ayuden, por ejemplo, a evitar ser víctima del phishing vía correo electrónico o web, o cómo gestionar las cuentas y las contraseñas. Kaspersky y Area9 Lyceum han creado un curso gratuito para ayudar al personal a trabajar de forma segura desde casa.
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Adoptar una solución de seguridad basada en la nube. Incluso las pequeñas empresas deben protegerse de las ciberamenazas, independientemente de que los empleados trabajen en dispositivos corporativos o personales. Kaspersky Small Office Security puede instalarse remotamente y administrarse desde la nube; no requiere mucho tiempo, recursos o conocimientos específicos para su despliegue y administración.
El informe completo, “Asegurando el Futuro del Trabajo”, se puede encontrar aquí.