Al entrar el mes de octubre se declara oficialmente el “comienzo del fin” de 2017 y, con ellos, se activan los propósitos emprendedores del próximo año.
Factory Pyme | Por Elibeth Eduardo | @ely_e
Quizás recién estás entrando en los 30 y, luego de leer nuestras recomendaciones recientes, se está preguntando por qué no tiene una buena idea para tener su propia empresa. Y eso le preocupa.
En este punto hay TRES (03) consejos para bajarle el estrés a su más ansioso deseo de fin de año:
1. Un negocio es más que una idea novedosa
Cualquiera que tenga ambición quiere hacer algo único y, si no grandioso, importante o al menos bien hecho.
Nada de eso significa que es una idea nueva. Tampoco que esa idea pueda hacernos ricos.
Hay aplicaciones, metodologías y aceleradoras que nos ayudan a diseñar los (imprescindibles) planes de negocio para darle forma de negocio a lo que, sino, es solo un sueño.
2. Comenzar con el 10%
Debería ser muy claro que, si no tiene TODO el proyecto en mente, listo para ser evaluado financieramente o validado tanto desde el punto de vista tecnológico como de mercado, dejar sus medios actuales de vida puede ser algo… prematuro.
Debe preguntarse:
- ¿De verdad puede vivir cómodamente del proyecto que tiene?
- ¿En cuánto tiempo?
- Y, mientras tanto, ¿cómo lo financiera y de qué vivirá?
Los comienzos son duros y no hay nada de malo en ser un emprendedor del 10% mientras depurados la idea, generamos un producto viable y encontramos los fondos para despegar… quizás desde nuestra casa y un pequeño local “virtual” en algún mercado de internet, porque es lo mejor que podemos pagar.
3. Empiece con una pregunta
Lo cierto es que, si le hacemos caso a Steve Jobs y otros genios emprendedores apasionados, hay. preguntas que debería hacerse como:
- ¿Qué le apasiona hacer?
- ¿Cuál es su sueño?
- ¿Qué cree que podría hacerlo feliz por el resto de su vida?
Sin duda, cualquier sueño que tenga que realmente lo apasione es un buen comienzo.
Sí su “proyecto” no tiene estas características, es difícil que llegue a innovar porque no es una actividad que tenga suficiente de su pasión. Y este es casi un requisito para los emprendedores.
O su interés. Piense en eso. Puede que se sorprenda.
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